martes, 23 de enero de 2018

MI GENERACIÓN X


Sin duda, la primera pregunta que se habrá hecho quien haya leído el título, es saber quiénes conforman mi generación X. No es fácil la delimitación. Pueden serlo, y de hecho lo somos por derecho propio, todos los ya hemos superado la barrera de los 50 años en cuánto que somos coautores y corresponsables de todo lo bueno o malo que nos ofrece hoy día el Mundo.

Pueden serlo, y de hecho lo son también, los que por su edad se sitúan en la horquilla entre los 31 y los 50 años, porque son también coautores y corresponsables de mucho de lo bueno o malo que hoy en día nos ofrece el Mundo, pero también son actores y responsables de los cambios que se estén produciendo.

Y lo son sin duda la generación más joven, aquellos que ahora tienen entre 15 y 30 años, y que en el año 2030 se acabarán de incorporar en unos casos al mercado laboral y en otros estarán ocupando los puestos de responsabilidad de empresas, instituciones y organizaciones o serán los representantes políticos en los distintos países. En uno u otro caso, serán los actores y responsables de todo lo bueno o malo que el Mundo nos ofrezca en ese año 2030. Serán, en definitiva, quienes lideren los cambios que necesitamos para tener un Mundo mejor.

Aunque podría dirigirme en este artículo a cualquiera de los tres grupos, quiero hacerlo de manera especial a este último grupo, el de los jóvenes entre 15 y 30 años.

Cuando hablo de Generación X, no utilizo la equis en cuanto grafismo identificativo de una variable o incógnita. Muy al contrario, mis hijos, los hijos de muchos familiares, amigos y conocidos, y sin duda los sólidos y convincentes argumentos expuestos en un debate sobre “Valores de Empresa”, organizado por la Fundación Rafael del Pino, por un joven de unos 16 o 17 años del que solo sé que es alumno de 1º de bachillerato de un instituto de Alcalá de Henares (Madrid), todos ellos, me hacen tener la certeza de que es una generación preparada para liderar los cambios necesarios.

Utilizo la equis como representación de la multiplicación de factores. Desde que nos enseñaron a multiplicar, 2 x 2 lo leemos como “dos por dos”. Me quedo con el por para convertirlo intencionadamente en P.O.R. Por qué como muy bien expuso un magnífico pero tal vez poco conocido directivo de una muy conocida empresa española, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) definidos por Naciones Unidas, otorgan a todos, y yo creo que especialmente os otorgan a los jóvenes, un Papel para trabajar y liderar los cambios que necesitamos para la supervivencia de nuestra especie en el largo plazo. Esos cambios están muy bien identificados en las medidas que desarrollan los 17 ODS.

Además, tenéis (tenemos todos) la Oportunidad de ser actores directos y principales en el desarrollo e implantación de esos cambios, y poder decir en 2030, cuando Naciones Unidas evalúe los avances en los ODS, “yo fui parte del cambio”.

Pero no solo tenéis (tenemos todos) un papel y un oportunidad, tenéis (tenemos todos) la Responsabilidad de hacerlo, de trabajar por conseguir un Mundo mejor y más sostenible que el que os dejamos quienes estamos en el primer grupo. Sobre todo vosotros, que seréis, como dije antes, la fuerza laboral, los líderes de las empresas, instituciones y organizaciones, y los representantes políticos de todos los países.

Jugad vuestro Papel, aprovechad vuestra Oportunidad, sacad a la luz vuestra Responsabilidad para dejar un Mundo mejor y más sostenible a las generaciones que os sucederán.















Enrique Sánchez Iniesta
Departamento de RRHH y RSE en el Instituto de Crédito Oficial (ICO)