José María Cancer Abótiz es empresario y gran colaborador del Programa Inicia. Gracias a emprendedores apasionados como él, el mensaje de la Fundación Rafael del Pino llega a los jóvenes.
Participar en el Programa Inicia supone para mí la obligación moral de contarle a chicos jóvenes lo que a mí me hubiera gustado escuchar a su edad. No habiéndome criado en una familia de empresarios, no descubrí realmente lo que era una empresa hasta que no estuve en los últimos años de mis estudios.
Habiendo trabajado después como empleado por cuenta ajena durante más de 20 años, decidirme a montar mi primera empresa propia no fue una decisión fácil, pero ahora no me arrepiento de ella.
Me gusta tener la oportunidad de contarle a jóvenes, que todavía tienen toda la vida por delante, la montaña rusa emocional que supone y el vértigo que produce ser empresario, pero también las satisfacciones que aporta. Así tendrán una herramienta más para decidir qué quieren ser realmente en la vida.
La gran moraleja del programa es que tanto para ser un gran emprendedor como para ser un gran profesional tienes que sacar a relucir desde tu interior los mismos valores y desarrollar las mismas capacidades. Las posiciones de empleador y de empleado son complementarias y se necesitan una a la otra. Si como empresario no valores a tu personal como tu mejor activo y si como empleado no sientes tu empresa como algo tuyo, quien está muerta es la empresa. Es solo cuestión de tiempo.
José María Cancer Abóitiz es
Co-fundador de KeelWit Technology, Madrid Fly, EYDISA Wind Tunnels, Mabuti Consulting y KLISS www.keelwit.com, www.madridfly.com