Un principio más de nuestros alumnos

Tras la participación en las sesiones del Programa Inicia Valores de la Empresa, invitamos alumnos a hacer su aportación con el 11º principio del Pacto Mundial de Naciones Unidas, la iniciativa internacional que promueve la implantación de 10 principios para la Responsabilidad Social Empresarial.  Sofía Antolín Blanco del Colegio María Inmaculada, nos hace llegar esta interesante reflexión:

 1. Igualdad entre hombres, mujeres y transexuales.  Lo incluiría en el bloque de Normas Laborables. Hoy en día todavía hay diferencias de sexos en la vida laboral, pese a la evolución del mundo y el esfuerzo y sacrificio de muchas personas para tachar nuestro pasado y enmendar nuestros errores. La mayoría de las personas creen que los pensamientos de desigualdad de género solo los tienen personas mayores que se han quedado atrás en este punto de la evolución, pero la realidad es más triste todavía, muchas empresas siguen valorando a la mujer por debajo del hombre. Esto se ve reflejado, en el ejemplos de las mujeres, no solo en su salario, sino también en los puestos que tienen, en su posibilidad de conseguir trabajo (bastante inferiores que los hombres aunque tenga la misma o mayor preparación) y, en algunos casos la imposibilidad de formarse más allá de los grados básicos o el avance de sus estudios superiores. 

Creo que todas las empresas deberían firmar este acuerdo y garantizar la igualdad entre ambos sexos, sin preocuparse si la mujer está embarazada o no, si se cree que un cargo determinado debe ser solo desempeñado por hombres debido a rasgos incoherentes, etc.

2. Aviso de corrupción. Lo incluiría en el bloque de Anticorrupción. Todos los días vemos en las noticias nuevos casos de corrupción y, algunas veces las empresas, sin quererlo, se ven envueltas en uno de estos casos porque, igual que al mentir, no solo se miente cuando no se dice la verdad sino también cuando se evita o se oculta. Por ello una empresa que haya visto posibles signos de corrupción en algún cliente, y no lo haya avisado, es igual de culpable que el cliente corrupto. Pero aquí llega el gran debate, ¿denuncias al cliente y te arriesgas a perderle, si no es culpable o te arriesgas a seguir con él, sin hacer caso a sus ingresos y cargar con las consecuencias? Por eso yo propongo que se cree un grupo de "investigadores" legales a los cuales se les pueda comunicar las sospechas, sin involucrar a la policía hasta que se prueben las sospechas (de lo que se encargaría este equipo) y se pueda denunciar. Creo que de esta manera y con la ayuda de todos podemos eliminar, poco a poco, la corrupción entre empresas.

Gracias por darnos esta oportunidad, espero haberles sido de ayuda, un saludo.